TikTok es la red social de moda y la que, junto con Instagram, triunfa entre nuestro alumnado y aunque en un principio nació destinada al público adolescente, desde el confinamiento también se ha extendido su uso en personas adultas, pero sin duda es mucho más popular entre los jóvenes, especialmente entre los menores de 14. El problema es que, según normativa europea, el acceso a este tipo de plataformas, debe de estar restringido a menores de 16 años, sin embargo, puedes registrarte en esta plataforma desde los 13, pero la realidad es que hay niños y niñas de 9 y 10 años con cuenta en esta red (aunque también puede usarse solo para "ver" sin estar registrado), lo que significa de entrada, que han mentido sobre su edad y que están normalizando que lo habitual en las redes es mentir.
TikTok permite crear vídeos cortos en los que los usuarios pueden cantar, bailar, actuar o hacer memes como telón de fondo de canciones pregrabadas o clips de audio. También permite una amplia variedad de opciones de edición, lo que favorece la creación de contenidos como escenas de humor o retos virales.
Todos estos aspectos se contemplan en el artículo que comparto y que considero de imprescindible lectura para estar al día de los entornos en los que se mueven nuestros adolescentes y prevenir posibles riesgos del uso de la citada plataforma.
Para ejemplo, este vídeo, encontrado en una búsqueda rápida en TikTok y que da indicaciones sobre como provocar a otros o a uno mismo, la asfixia, un reto de moda últimamente en esta red social. Como se puede observar, este chico trata con absoluta banalidad un tema que puede causar graves problemas. Pensemos si es importante o no, lo que ven nuestros adolescentes. Por eso, es tan necesario potenciar el pensamiento crítico, que les permita afrontar con criterio situaciones como estas y usar la razón para tomar decisiones adecuadas.